Ayer se cumplió una década de la instalación de la primera carpa en la Plaza 25 de Mayo, que muy pronto se transformó en la “Plaza del Aguante” y finalmente en “Plaza de la Dignidad”, el espacio vital del reclamo por la dignidad de miles de empleados estatales agobiados por el retraso salarial y por la corrupción del Gobierno.
Así un grupo de organizaciones sociales, sindicales y políticas presentó una muestra de fotografías, debatió y puso en el aire una radio abierta con grabaciones y planteos de los autoconvocados de la Plaza de 1999.
A diez años, la rebelión popular surgida de un atraso salarial de cuatro meses de sueldo y dos aguinaldos, se convirtió en un ícono de la transformación política e institucional de Corrientes, proceso que aún sigue abierto ya que aquellos cinco puntos de la Plaza que se levantaron en el puente aún están pendientes de resolución.
En declaraciones a los medios de comunicación el titular del Sindicato de Trabajadores Judiciales (Sitraj), Juan Carlos González, explicó que “es algo inconcluso” el cumplimiento de los fallos judiciales contra los funcionarios acusados de los casos de corrupción en los tiempos en que gobernaba el Partido Nuevo.
“Seguimos reclamando por una Justicia independiente, para que las causas que se inician fundamentalmente en la Administración Pública, que los que cometieron delitos sean juzgados e inclusive se cumplan las condenas”, señaló González.
“Es algo inconcluso, porque tenemos el caso de Raúl “Tato” Romero Feris que tiene 3 condenas firmes y que hasta ahora lamentablemente no se le ha obligado a cumplir con ninguna, ya que tendría que estar en la cárcel”, indicó.
Y en el mismo tono reclamó, “que devuelva las sumas millonarias que están establecidas en los fallos”. “Esto -añadió- lamentablemente no ocurrió y fundamentalmente porque falla la Justicia actual, que es directamente responsable porque sino no ocurriría ni la desfachatez de pretender ser candidato nuevamente”.
“A eso nos referimos cuando decimos que aquello que se inició, esa gesta, todavía no termina”, indicó el titular del Sitraj.
Igualmente cabe destacar que los cambios profundos que se reclamaron desde la Plaza de la Dignidad todavía están pendientes. La Dignidad que supone Educación, Salud y Trabajo genuino para todos los correntinos están planteadas como el paradigma de este proceso que sigue abierto hasta encontrar desahogo institucional desde políticas de estado que resuelvan los principales problemas sociales planteados.
“Y luchan siempre esos porfiados, y luchan siempre, siguen luchando…” sonaba ya caída la noche esta canción en la voz de un artista solidario con la gesta. Entre el ruido del reencuentro, las torta fritas y el mate compañero se volvió a sellar el compromiso de disparar la memoria de los correntinos para que el cambio se imponga pronto, más temprano que tarde, hasta la Dignidad.
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